jueves, 17 de julio de 2014

2.- Llega León y Llerena

D. Eduardo León y Llerena, poseía el capital suficiente para acometer las obras de infraestructura precisas y, con ello, empezó el periodo mas brillante de su historia, el de las grandes reformas y su engrandecimiento, lo que permitió, mediante una explotación adecuada y bien atendida, traducirse en un constante aumento de la concurrencia. 


Tambien favoreció este engrandecimiento la línea de ferrocarril Madrid-Sevilla, con estación a dos kilometros del pueblo, en la que paraban todos los trenes de viajeros, y que la localidad dispusiera de medios de transporte de todo tipo, de estación telégrafica y, desde 1902, alumbrado electrico en calles, casas y paseos.

Entre las obras de infraestructura acometidas se encontraba un murallón de cinco metros de altura alrededor de los manantiales de fuente Agria y San Luis, para protegerlos de las inundaciones del rio, cubierto por un templete de hierro fundido, con sólida techumbre para que, al amparo de la interperie, sobre todo de la lluvia y el sol, las personas hagan uso del agua. 
Vista del reducto de protección del manantial Fuente Agria, en su diseño original en forma eliptica con el eje mayor apuntando en dirección a la corriente para soportar las crecidas.
En primer plano, con personas sentadas al borde de su murallón, se encuentra el reducto de protección del manantial San Luis. A su derecha, separado del conjunto principal, el reducto del manantial Buena Esperanza.

Hasta los manantiales se construyó un galería de cincuenta metros de longitud, formada por una columnata de hierro fundido con sólida cubierta y cortinajes en los huecos. En fotografias de la época se ven las distintas que se instalaron porque se las llevaba el rio.




Imágenes de las primeras galerías de hierro forjado. La amplia separación entre los soportes permitia el paso del agua y resistir los embates de las crecidas. Aun así fue necesario reconstruirlas en varias ocasiones.
Tambien construyó un edificio destinado a administración  y para baños y duchas " ...consistente en un elegante chalet formado por un amplio vestibulo donde está instalada la Administración y descansan los concurrentes al Balneario. A la derecha de esta vestibulo está la sala de hidroterapia con su tribuna para duchas movibles, sus duchas dorsal, de lluvia y regadera y gran ducha circular y dos gabinetes anejos, y en el otro una pila destinada a las personas que han de combinar el uso de la ducha con el baño. A la izquierda del mismo vestíbulo se encuentra otra sección balnearia, formada por cuatro elegantes cuartos para baños generales y una salita para las pulverizaciones. 


 Todos estos aparatos pueden ser alimentados por agua potable o por agua medicinal, y una y otra, ya fria, ya a la temperatura que se indique en la prescripción facultativa, y a todos estos aparatos se unirá en breve otro destinado a la ducha ascendente o rectal. Por donde se ve que las aguas de Marmolejo pueden ser utilizadas, no solo en bebida, sino bajo la forma balneario o hidroterápica que se considere oportuna, por formar el complemento de su adecuada aplicación".

Otro edificio contiguo que se construyó en esta época fue una nave de embotellado y almacén.

Se plantó "un amplio y hermoso parque, expresión de habilidad y buen gusto de quien lo dirigió, Manuel Méndez Cordova, y esplendidez valiente en quien proporcionó los medios para construirlo", de grandes paseos y jardines, con profusión de árboles (sóforas, plátanos de la India, papeleros, aligustres, pinos, acacias, eucaliptos y palmeras de varias clases), y arbustos (clindas, glicinias, damas de noche, lilas y buganvillas). 


En los arriates y setos: boneteros, tuyas, abrótano, romero y gan variedad de rosales, tanto de pie como trepadores, así como enredaderas. Junto al parque creó una huerta con naranjos (dulces y agrios), granados, nísperos, madroños y caquis. Todo ello regado con el agua de la Fuente del Pilar, mas arriba en la carretera que, por tubería, era conducida hasta la alberca del camino de la Seña, y de allí distribuida por todo el parque y huerta por un extensa y bien planificada red de canalillos, sifones y conductos, parecidos a los que hay en el patio de la Mezquita de Córdoba y Alhambra de Granada.

Otra construcción de aquel tiempo fue la escalinata y puente sobre el arroyo Las Graillas, hasta el parque, para facilitar un camino mas corto a los agüistas que bajaban y subían andando.

Extractos del libro "Balneario de Marmolejo, Siglos XIX y XX, Engrandecimiento y Decadencia" por Manuel Méndez González, Padilla Libros, 2001

Se puede encontrar mas información, excelentemente recopilada y presentada en 

http://villademarmolejo.es/

http://lugardemarmolejo.wix.com/marmolejo








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